Evolución favorable de El Cordobés tras su grave cogida de Marbella (Málaga)

El torero Manuel Díaz "El Cordobés" sigue ingresado en la Clínica El Ángel de Málaga donde esta recuperándose de la grave cogida que sufrió ayer en Marbella (Málaga) cuando fue corneado de gravedad en el muslo derecho inferida por un toro de Varela Crujo al entrar a matar, al que le cortó las dos orejas y el rabo. Chema Díaz, comenta sobre el estado de su hermano: "No ha tenido fiebre pero le ha costado descansar. Aun así, lo peor llegó con el despertar de la anestesia. Hay veces que sienta mejor y otras peor, y el despertar fue complicado. Pero todo eso ya ha pasado".

Durante la mañana de este lunes el doctor Luna Jiménez ha pasado por la habitación del torero para revisar la herida: "Le ha practicado la primera cura y ha dicho que la herida tiene buen aspecto. No le ha querido retirar aún el drenaje, pero quizá lo haga mañana. En función de si se lo quitan o no, podría recibir el alta hospitalaria este martes", adelanta Chema Díaz.

La herida -que se suma a la veintena larga que el torero ha sufrido en su carrera- provocó la rotura de fibras del vasto interno y del abductor: "Hasta que no se ponga de pie no podremos saber la evolución de esos daños", explica el hermano de El Cordobés, que matiza: "Él está tranquilo y resignado, porque tantas horas de hospital en alguien acostumbrado a ir de un sitio para otro continuamente se hace pesado, pero está tranquilo porque sabe perfectamente por qué llegó el porrazo. La de Marbella no ha sido una de esas cogidas que te hacen dudar. Él se fue derecho como una vela tras la espada y el toro tenía tendencia a meterse por dentro por el pitón derecho. Entre esas dos cosas y el saltito que pegó el animal en el embroque, echando las manos por delante, la cogida tenía que llegar".

Los médicos que le atienden calculan al menos 12 días de recuperación para volver a torear, por lo que el torero perderá casi con total seguridad los festejos de este sábado en Vinaroz y del domingo en Muro. "Lo que sí puedo asegurar es que Manolo no piensa perderse la corrida del día 30 en Burgos. Como todos los años es una fecha clave en su temporada. Allí celebra todos los años su cumpleaños ante una afición que le profesa un cariño especial", relata Chema Díaz.

Percance al margen, lo cierto es que El Cordobés cuajó al toro de Varela Crujo que le hirió y terminó cortándole los máximos trofeos: "Estuvo muy firme con el toro, que era de llevarlo y hacerle las cosas bien porque le costaba trabajo coger los vuelos. Luego, una vez los cogía, embestía bien, pero era mironcete y le costaba arrancarse. Él sabía que le podía echar mano, pero precisamente por eso piensa que el percance le va a afectar poco"; y agrega para concluir: "Cuando se levantó todo el mundo fue a mirarle la cornada pero él se fue a buscar al toro para verle rodar sin puntilla. Hubo un toro bravo, pero también un torero que supo estar a la altura".