Solitaria vuelta al ruedo para Juan José Padilla en el cierre de la feria del Señor de los Cristales de Cali (Colombia)

El matador de toros gaditano Juan José Padilla dió la única vuelta al ruedo en el festejo que echó cierre a la feria taurina de Cali (Colombia) y que el ganado no dió el triunfo deseado para la terna, un encierro de Juan Bernardo Caicedo, de excelente lámina y bravura al empujar en los caballos donde todos recibieron suficiente castigo pero con muchas dificultades y peligro, especialmente el lote del colombiano Sebastián Vargas que pechó con todas las dificultades de los toros imposibles para el toreo. La plaza apenas cubrió la mitad del aforo en una tarde con sol quemante y bochornoso. Solo una vuelta al ruedo por cuenta del propio Juan José Padilla es el pobre balance de este cierre ferial. Completaban la terna el nacional Sebastián Vargas, que pechó con el lote más peligroso y correoso del sexteto, y Antonio Ferrera, que emborronó con el acero su interesante primera labor, lució especialmente con los palos ante el jabonero que cerró plaza y abono. Solo existe un calificativo para los toros del colombiano Sebastián Vargas: imposibles para torear. Además del peligro manifiesto, sacaron defectos como la tardanza en acudir al llamado, y recostarse cuando embestían. A su primero hubo de cazarlo hábilmente, y al segundo – menos mal – le vació la espada efectivamente.

Cuando las cosas comienzan mal, así acaban. Antonio Ferrera tuvo por delante un toro con nobleza, pero muy tardo de embestidas, al que endilgó una interesante faena, variada y emotiva que lamentablemente emborronó con el acero. En el sexto, último ejemplar de la feria, un jabonero de impecable presentación el diestro puso la plaza en pié tras un tercio emocionante con las banderillas, llegando el toro con las fuerzas mermadas a la muleta donde se lució en varias series por ambos lados, rematando al compás del pasodoble.

Cali (Colombia), 30 de diciembre de 2014. Plaza de Cañaveralejo. Última de la Feria del Señor de los Cristales. Toros de Juan Bernardo Caicedo, bien presentados y complicados en líneas generales, especialmente los jugados en 2º y 5º lugar. Juan José Padilla, silencio y vuelta al ruedo; Sebastián Vargas, silencio en ambos; y Antonio Ferrera, silencio y ovación con saludos. Entrada: Media plaza.