Rafael Cañada mejora de su última operación

Sigue recuperándose el banderillero francés Rafael Cañada en un centro hospitalario de Valencia tras la última intervención quirúrgica a la que fue sometido hace unos días. “El trabajo de neurocirugía está terminado. Ayer estuvieron viéndome los cirujanos y me dijeron que todo marcha por buen camino. La fuga que había de líquido cefalorraquídeo está mermando, está estabilizándose, y eso les lleva a descartar cualquier nueva operación. Eso me tranquiliza y me da esperanzas”, apunta el torero de plata, lesionado de extrema gravedad en la novillada celebrada en Valencia el pasado 11 de mayo. “Desde la última intervención estoy guardando reposo en la cama, pero los médicos me dejan levantarme en días alternos para ducharme y asearme y noto que ya empiezo a caminar bien. Evidentemente me tomo mis tiempos, porque al estar tanto tiempo encamado es fácil marearse y perder un poco de estabilidad, pero cuando se me pasa ese primer mareo lógico logro caminar perfectamente. No estoy para correr una maratón -bromea- pero sí siento que estoy cada vez más cerca de poder llevar a cabo una vida normal”, relata Cañada. Su próximo objetivo es poder continuar la rehabilitación cerca de su casa. “Llevo en Valencia desde el 11 de mayo y aunque el trato es magnífico, echo de menos estar cerca de mi hogar”. Cañada reside en la zona de Hendaya, comuna francesa fronteriza con España, muy próxima a Irún y San Sebastián. “Todavía no hay fecha marcada para el traslado, pero siento que está cada vez más cerca”, concluye ilusionado.